El calvario de Lonzo Ball: Dos años desde el último partido jugado con Chicago Bulls

Chicago Bulls ha afrontado un descenso en su rendimiento debido en parte a la ausencia de su base Lonzo Ball, que jugó por última vez en enero de 2022. Las habilidades únicas de Ball para conectar con sus compañeros e impactar tanto en ataque como en defensa fueron cruciales para el éxito del equipo.

Desde su lesión, el récord de temporada regular de los Bulls se encuentra en 78-88. La capacidad de Ball para imponer el ritmo, contribuir con pases de espaldas al aro y lanzar con precisión de 3 puntos mejoró significativamente el potencial ofensivo de jugadores clave como Zach LaVine, DeMar DeRozan y Nikola Vučević.

En defensa, la asociación de Ball con el escolta Alex Caruso fue eficaz para desorganizar a los rivales. Sin embargo, Lonzo Ball ha tenido problemas de rodilla y se ha sometido a tres operaciones desde enero de 2022, la última de las cuales consistió en un trasplante de cartílago en marzo de 2023. A pesar de los desafíos, sigue siendo optimista sobre su regreso, declarando su intención de volver a jugar durante el día de los medios de los Bulls en el pasado mes de octubre.

Actualmente descartado para la temporada, se espera que Ball empiece a correr este mes de enero. Los Bulls, que se enfrentan a una nómina cercana al umbral del impuesto de lujo, pueden considerar el uso de la opción de jugador de Ball de 21,4 millones de dólares para la próxima temporada en posibles escenarios de comercio. El equipo tiene una excepción de jugador lesionado de 10,2 millones de dólares para Ball hasta el 10 de marzo, que probablemente no se utilice.

Si Lonzo Ball permanece en los Bulls y no puede regresar la próxima temporada, una disposición podría eximir su opción de jugador del tope salarial y las cifras del impuesto de lujo. Tanto Ball como los Bulls se centran en su recuperación y en que recupere su plena salud.