La presión que está sobre los hombros de
Bronny James de cara a su posible aterrizaje en la NBA la próxima temporada 2024/25 parece estar muy por encima de sus habilidades baloncestísticas.
Es cierto que el chico ha crecido leyendo en la prensa americana que su padre iba a intentar aguantar jugando para compartir cancha con él. Lo que quizás no se esperaba es que su padre,
LeBron James, siguiera siendo uno de los mejores de la liga con casi 40 años y que su nivel de juego en su primer año en la
NCAA no fuera el esperado.
Así, con las estadísticas en la mano: 5.3 puntos, 2.4 asistencias, 0.2 tapones y 0.7 robos en 19.8 minutos de juego en los veinte partidos que ha disputado con USC hasta la fecha no parecen ninguna maravilla. Aunque hace unos meses se especulaba cuando todavía estaba en el Instituto que podría entrar en la lotería hace ya un tiempo que parece claro que no es un jugador que tenga ningún atractivo de cara a la una selección de primera ronda del
NBA Draft 2024.
El hecho de que LeBron James vaya a ser agente libre este verano (tiene una player option con Los Angeles Lakers que rechazará) no ayuda para que se hable menos del futuro de Bronny, más bien todo lo contrario.
Y es que han surgido numerosos rumores NBA sobre equipos supuestamente interesados en elegir al joven
Bronny en el draft para así intentar atraer a su padre. Esto mezclado con análisis de expertos asegurando que el jugador no está aún preparado para la mejor liga de baloncesto del mundo y que debería seguir otro año en la Universidad.
No sabemos qué pasará. Aunque suponemos que
LeBron lo tiene todo bastante claro y que lo habrá hablado con Bronny. Lo normal es que el Rey continúe en Los Angeles Lakers más allá de este verano viendo su alto rendimiento en la cancha. Así, veremos si a su hijo le acaba eligiendo algún equipo que esté interesado en sus habilidades baloncestísticas o uno que busque el circo de tener al hijo de LeBron en sus filas. O no lo elige nadie y sigue un año más en la NCAA. Tiempo al tiempo.