La temporada 2023-24 marcó el regreso de
Minnesota Timberwolves a los primeros planos de la conferencia oeste. Después de 20 años, la franquicia volvió a disputar unas finales de conferencia, y a pesar del resultado final, el balance ha sido muy positivo. Por eso es que desde gerencia se ha dicho que pagarán el costoso impuesto de lujo y así retener las piezas del equipo e ir a por la revancha el año próximo.
Minnesota proyecta tener uno de los equipos más costosos en términos de salario para 2024-25. Ya tienen $191 millones garantizados a 9 jugadores, superando el seguno límite del impuesto de lujo que instrumenta la NBA ($189,5) y ese monto sería superior a plantel completo.
Eso significa que los Timberwolves deberán pagar una verdadera millonada a la liga por penalización, algo poco común en los equipos de mercado chico.
Tanto Glenn Taylor (dueño mayoritario) como así también Alex Rodriguez y Marc Lore (posibles futuros dueños) han dado a entender que ellos no están considerando desmantelar el plantel a causa de dicho impuesto, pero sí entienden que hay una dificultad en completar la escuadra.
Mucho por resolver para un equipo que ha demostrado que puede competir por el anillo. En éstos playoffs quedó demostrado que Timberwolves será uno de los animadores de la NBA en las temporadas futuras. El talento y la personalidad de su joven estrella,
Anthony Edwards, anticipa que grandes momentos lo esperan.