Josh Richardson señalo las dificultades que tuvo al jugar al lado de Luka Doncic cuando estuvo en Dallas

Josh Richardson, el atlético escolta que actualmente se encuentra con Miami Heat estuvo en el podcast de Udonis Haslem llamado "The OG Podcast", y se refirió a su paso por los Dallas Mavericks y al desafío que significó en su momento jugar al lado de Luka Doncic.

Richardson jugó en Dallas Mavericks entre 2020 y 2021, momentos en los que los Mavericks todavía no habían alcanzado mayor éxito en los playoffs y con un Luka transitando su 3er año en la NBA. En una entrevista reciente, Richardson habló sobre lo que conlleva jugar al lado de una joven superestrella como Doncic y la presión que se genera en sus compañeros.

"Creo que cuando llegué allí era cuando estaba subiendo, como empezaba a ascender de manera increíble", dijo Richardson. "Así que creo que él estaba intentando encontrar un equilibrio entre cuando subir el ritmo, cuando relajar y cuando sacar todos sus trucos."

"Quiero decir que Luka es un jugador increíble, pero a veces me siento como si estuviera tratando de encontrar mi lugar en el equipo", agregó Richardson. "Quiero ser capaz de hacer mi propio juego y no solo ser un complemento para Luka".

"Para un superestrella como él, sabes que tienen ese margen de maniobra, y tienes que dejar que él lo resuelva, así que para mí fue un poco difícil", explicó.

Aquellos momentos de la carrera del talentosísimo esloveno el nivel de talento alrededor no es que abundaba precisamente, por lo que a Luka le dieron las llaves del auto y básicamente era quien tomaba todas las decisiones. El beneficio de esa experiencia dice Richardson que tenía su costo, al crear cierta confusión entre otros miembros del equipo.

Hoy por hoy, Luka se encuentra jugando su primera final de NBA, habiendo pasado además por unas finales de conferencia en 2022. Doncic está seguramente en el podio de los mejores de la liga y a pesar de que su equipo esté abajo 0-2, se ha vuelto un jugador que siempre toma la decisión correcta con el balón en las manos, un elogio que el propio LeBron James ha tenido para con la figura de los Mavs.