LaVar Ball se hizo famoso hace unos años por sus declaraciones polémicas. Desde entonces, se ha calmado bastante, aunque cuando habla no se muerde la lengua. Es el padre de
Lonzo Ball, jugador de los Chicago Bulls, y
LaMelo Ball, estrella de los Charlotte Hornets. Dos grandes jugadores pero muy castigados por las lesiones. LaVar culpa por ello a los entrenadores NBA y a Puma.
Tanto LaMelo como Lonzo no han estado a la altura del bombo que su padre LaVar puso en ellos, y han estado plagados de lesiones durante toda su carrera.
Lonzo que en su carrera ha promediado 11,9 puntos por partido con 5,7 rebotes, y 6,2 asistencias ha sido más un jugador defensivo que ofensivo. Su mejor año llegó en la temporada 2020-2021 donde promedió 14,6 puntos por partido con los New Orleans Pelicans. Luego lo siguió con un impresionante comienzo con los Chicago Bulls la temporada siguiente disparando un mejor 42,3 por ciento de tres en su carrera.
Sin embargo, no ha jugado desde esa temporada 2021-2022 donde solo disputó 35 partidos al sufrir una lesión de menisco. La última vez que Lonzo jugó fue el 14 de enero de 2022. Han pasado más de dos años desde que jugó y es lamentable que esta lesión lo haya mantenido fuera tanto tiempo ya que estaba empezando a encarrilar su juego ofensivo.
En cuanto a LaMelo que ha tenido un mejor comienzo de su carrera que Lonzo también se ha ocupado de las lesiones. Ganó el rookie del año y también fue all-star en 2022 también. Ha promediado 20 puntos por partido con 6,2 rebotes, y 7,4 asistencias por partido.
A diferencia de Lonzo, LaMelo sí tuvo una temporada en la que jugó más de 60 partidos en un año, sin embargo, las dos últimas temporadas sólo ha jugado un combinado de 58 partidos debido a las lesiones.
Lavar Ball habla de las lesiones de su hijo
LaVar Ball que ha estado muy tranquilo en los últimos tiempos con su hijo en comparación con cuando fueron reclutados y que estaba apareciendo cada semana con un comentario sobre ellos. Finalmente ha comentado por qué cree que sus hijos han sufrido lesiones.
"La razón por la que duelen es porque se alejaron de mí. Y empiezan a hacer estos entrenamientos de raíz. Porque si sigues corriendo las colinas, vas a mantener ese poder y esa fuerza. Pero empiezas a lidiar con estas gomas y a hacer estas cosas ligeras, por supuesto que vas a empezar a romperte... Muchas cosas tienen que ver con los zapatos andrajosos que Melo usa. Esos zapatos no están hechos de la manera correcta para él. Por eso siempre se tuerce el tobillo".
LaVar echó la culpa al personal de entrenamiento y a los zapatos que llevan, ya que no llevan los zapatos de LaVar. Una vez más está echando la culpa a otras personas por las luchas de su hijo en la NBA. Esperemos que Lonzo y LaMelo puedan estar sanos el próximo año y empezar a jugar al baloncesto de alto nivel de nuevo.