En los últimos años, los
Boston Celtics han estado invirtiendo considerablemente, adquiriendo contratos costosos con la esperanza de lograr el éxito en las Finales de la NBA. Hasta el momento, parece que esta inversión ha dado resultados positivos, ya que el equipo ha mostrado un rendimiento mejorado. No obstante, este gasto tendrá consecuencias financieras en el verano.
Se espera que los Celtics gasten 197.012.551 dólares en la temporada 2024-25. Eso se debe en parte a la enorme extensión de contrato que le dieron a
Jaylen Brown el verano pasado. También están pagando mucho por otros jugadores, en particular
Jayson Tatum y Kristaps Porgingis.
197 millones de dólares está muy por encima del tope salarial, lo que significa que pagarán bastante en impuestos. La única posibilidad que tiene el equipo de pagar menos sería si el recién llegado
Jrue Holiday declinara su opción de jugador de 39.403.894 dólares para la temporada 2024-25. Pero no sólo tendría que declinar esa opción, sino también dejar el equipo, y ambas opciones parecen poco probables. Pero no sólo tendría que rechazar esa opción, sino también abandonar el equipo, y ambas opciones parecen poco probables.
Eso significa que los Celtics probablemente tendrán que pagar casi 200 millones de dólares la próxima temporada. Por supuesto, eso podría considerarse dinero bien gastado si los Celtics alcanzan su objetivo final de llegar a las Finales de nuevo esta temporada.
Ahora mismo, eso no parece para nada descabellado. El equipo está actualmente 44-12 y es el mejor equipo no sólo de la Conferencia Este, sino de toda la NBA. Si el equipo llega hasta el final este año, pagarán con gusto todo lo que tengan que pagar para mantener el equipo unido. Pero si vuelven a quedarse cortos, existe la posibilidad de que se deshagan de algunos contratos para reconstruir la plantilla.